Datos personales

Mi foto
Mi mas oculto deseo fue siempre ser escritor y aprender varios idiomas. He llegado a defenderme bien en Ingles y chapurrear algo de Frances. El cine y la fotografia me fascinan. La música, de todo tipo, ha sido siempre mi relax. La amistad la valora mas que a nada en la vida.

lunes, 9 de junio de 2014

MADRID AÑOS 40






AÑOS CUARENTA, JUEGOS  (primera parte)


Nada mejor para jugar los crios del barrio de Tetuan que la calle en los años cuarenta, cada una tenía su panda y por supuesto los chicos de una calle no jugaban ni formaban alianzas con los de otra diferente.
Las peleas eran infrecuentes, mucha tutela y vigilancia por parte de las autoridades del Regimen Franquista para que ni tan siquiera los chicos se pelearan entre ellos, lo más una "drea" con pequeños guijarros que podía escalbrarte si te pegaban de lleno, nunca era una herida seria, una pequeña brecha, un poco de sangre y a esperar que se curara.



Se hacía acopio de pequeñas piedras que estaban previamente acordadas, se metían en los bolsillos y con cañas flexibles se lanzaban como si fueran catapultas a los chicos y chicas del bando opuesto. 
Se fijaba un tiempo de juego y a no ser que algun rival se rindiera no había vencedores o vencidos.

La "drea", o tirachinas,  siempre se jugaba en los descampados que tuvieran arboles o bloques de piedra donde esconderse, y era frecuente encontrarlos pues cerca de la zona había un sitio donde pulían los bloques para ornamento de casas o sepulturas.
El invierno o el otoño aprovechando el frio y la ausencia de gente por los descampados era una buena época para echar unas "dreas! o unas "pedreas", aunque estas últimas solían ser mas peligrosas pues los guijarros eran mayores. 
No todos los chicos o chicas participaban en ellas pues alguno tenían auténtico miedo de resultar escalabrados y que luego en sus casas recibieran una buena tunda de su madre.

De los tres hemanos, la mediana y el pequeño eran los que participaban en las "dreas" que no en las "pedreas" pues tenían cierto temor a las consecuencias si resultaban descalabrados. 

"Alza la Maya" era otro de los juegos muy propicios para el invierno en las tardes de frio, igual que "El Rescate"  el "Escondite" o "Policias y Ladrones". En cada lugar de España se les llamaba de forma diferente pero en esencia eran muy similares.
Las reglas del "Rescate" o el "Escondite" eran:

El Rescate
El que la ligaba se echaba a suertes y tenía que contar hasta cien para que así a los demás les diera tiempo a esconderse. Según iba encontrando a sus compañeros escondidos tenía que decir cogido/a y llevarlos a un lugar. El que la ligaba, según iba buscando a los demás escondidos lo tendría que hacer con cuidado, ya que alguien podría salir de su escondite y correr al lugar donde estaban sus compañeros y gritar: ¡salvado! De esta manera, salvaba a sus compañeros que tendrían que volver a esconderse.


Y para "Alza la Maya"

 
un juego de muchachos en la provincia de Álava: consiste en esconderse todos, menos uno que queda al cuidado de un objeto, generalmente una piedra, al cual se da el nombre de maya. El lance está en llegar a la maya antes que el encargado de cuidarla, cuando éste se separa de ella para descubrir a los escondidos”.

Cuando la maya o el objeto se tocaba sin ser visto y nombrado por el que buscaba a los escondidos el chico o la chica estaban salvados y entre los que restaban si uno era descubierto le tocaria custodiar la maya.
Cuando se divisaba a un escondido eñ vigilante buscador tenía que llegar a la piedra u objeto antes que el descibierto, tocar la maya u objeto y gritar:  Alza la Maya por Pepe, o Carmen, y ese sería el que cuidaria la maya y buscaría a los escondidos en el siguiente turno.

Nada mejor ni mas divertido para estos crios que tener una pandilla en la mísma calle y salir a jugar todos mezclados, chicos y chicas, a los muy diferentes juegos que a falta de otros entretenimientos se practicaban en plena calle.





el gatufo


No hay comentarios:

Publicar un comentario