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Mi mas oculto deseo fue siempre ser escritor y aprender varios idiomas. He llegado a defenderme bien en Ingles y chapurrear algo de Frances. El cine y la fotografia me fascinan. La música, de todo tipo, ha sido siempre mi relax. La amistad la valora mas que a nada en la vida.

domingo, 4 de mayo de 2014

TIEMPO Y CASUALIDAD




 




Subjetivo u Objetivo, una palábra es el antonimo de la otra y pareciera que no pueden darse ambas valoraciones a un mismo objeto, pensamiento, opinión o cualquier otra idea que se nos ocurra. 
Es prácticamente imposible ser una cosa y la contraria simultaneamente, pero es siempre así?.
Un si puede ser un no?. O de hecho un no puede interpretarse como un si?.
Pues depende del contexto de la frase o la intención con la que se diga. Y de hecho en nuestro idioma castellano se usan ambas expresiones juntas, simultaneamente, en diferentes frases.

Ejemplos hay infinidad y uno viene a "tiempo":
+ Si no tuviera teclado no podría escribir esta frase.

Y a una pregunta sencilla invertimos el orden:

+ Me apetece ir al cine, estas cansado?
+ No, si tu quieres ir.

Son ejemplos referidos al lenguaje, nada tan dispar como un SI o un NO, pero se combinan.

Si nos fijamos en lo que llamamos "tiempo" no hay nada mas objetivo y subjetivo que ese concepto tan medible objetivamente o tan poco medible subjetivamente. 

Diez minutos esperando a que acabe un partido se nos hacen interminables si vamos ganando el encuentro, cada minuto parece eterno.

En el equipo contrario, que pierde, esos diez minutos pasan en un flash y los minutos pareceran correr desenfrenados.

El tiempo se mide, objetivamente, no puede medirse subjetivamente. El tiempo de dolor parece eterno, el del gozo siempre se hace breve.

Que tiene que ver el tiempo de un anciano con el de un niño?.
Pueden medirlo igual?, o el de un adolescente?, el de un enamorado que espera a su amada en la primera cita?.

Los años transcurridos de un adulto, con una vida rutinaria de trabajo, casa, fin de semana, trabajo, casa y un nuevo fin de semana. Un año, y otro más, cinco, diez, quince, veinte años de rutina, que dejan en el recuerdo cuando ese adulto se hace anciano?.

Han pasado sin sentir, igual veinte que cuarenta, solo los cambios en el entorno, en nosotros, en nuestros hijos, en los modos de vida nos indican que el tiempo ha pasado. Objetivamente medimos el paso del tiempo por lo que nos rodea, por nuestro propio aspecto. Subjetivamente parece que fue ayer cuando eramos niños o tuvimos nuestro primer amor.

Miro hacia atras y vivo periodos de tiempo que en mis recuerdos parecen deliciosamente largos por la felicidad que me reportan o por lo intensamente que fueron vividos.
Un viaje, unas vacaciones al lado de la persona amada, en su momento se hicieron cortos y en los recuerdos que tenemos años despues se agrandan y ocupan espacios significativos en nuestro tiempo ya vivido.


 



Años y años de vivida rutina no dejan huella, solo el sufrimiento, una pérdida, un accidente, unas vacaciones, rompe el montón de años vividos sin ningun recuerdo significativo. Semanas, meses, años, vividos en un flash para nuestro recuerdo.

El tiempo vivido se nos acorta cuando tenemos poco interesante que recordar y aunque dicen que todo queda registrado en nuestro cerebro lo único que nos queda de una larga vida son pequeños retazos de lo que llamamos tiempo o años de existencia.

El número de años, de días, de horas son medibles, pero en nuestra cabeza forman un informe montón de tiempo del que solo destacan retazos de vida.

Cuarenta años quedan reducidos a unos cuantos meses, o incluso días, en los que en nuestra vida sucedió algo siginificativo, bueno o malo, y es en realidad lo que al final cuenta de una sucesión milenaria de horas.

Emiliano recuerda un año y cuatro meses vividos con intensidad de enamorado. No se borran, tienen dias y horas, momentos felices que permanecen grabados en su memoria.
Otra infinidad de años han pasado a formar un monton informe de meses o años en los que fue haciéndose adulto, mayor, y por que no? ya viejo, aunque en su mente el no quiera admitirlo.  

Con la mente no cumplimos años, no hay tiempo medible, podemos seguir siendo jóvenes hasta el mismo dia de nuestra muerte.


continuara....


el gatufo
 

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