Nada mas dificil que convivir con alguien que padece depresión, partiendo de la base que ni el mismo se entiende, ni sabe el motivo por el que le ha venido esa dolencia, ni tiene ganas de vivir, ni de comer, ni de hablar, todo le cansa o le afecta, repitiendo una y otra
vez el mismo "mantra", que no quiere vivir, que está fatal, y que ojala se muriera y así dejaba de hacer sufrir a quienes le quieren.
Dificil, muy dificil, yo he padecido dos depresiones y esta que se está curando lentamente es la tercera.
Se lo que decimos, como nos comportamos, como aburrimos y lo peor es que podemos arrastrar con nuestra depresión a la persona que mas nos quiere y nos está soportando.
Sabes que estás haciendo daño, lo sabes bien, mas no hay modo de evitarlo.
La efermedad en general nos hace egoistas, la depresión nos hace mucho mas egoistas si cabe, hacemos daño pero al sentirnos "tan mal" y sabiendo bien que hacemos daño poco o nada tratamos de hacer para evitar ese daño.
El ser humano siempre necesita "un paño de lágrimas" para deshogar sus penas o dolencias, con la depresión la necesidad se multiplica, necesitamos que nos escuche "esa" persona que amamos a pesar de ser conscientes de que la estamos jodiendo de muy mala manera.
Del resto se pasa, no queremos hablar ni relacionarnos, no podemos de hecho pues apenas nos sale la voz.
No hay nada que hacer, la voz se vuelve ronca, inaudible fiel reflejo del estado anímico del sujeto.
En mi caso dos minutos hablando con Cuca, mi mujer, y ya estaba fatigado, sin fuerzas para continuar.
La situación se agrava cuando NO te sientes entendido prácticamente por nadie.
La efermedad no se ve, no se entiendo, no te falta de nada, vives en una buena casa, sin problemas aparentes, no falta el dinero, tampoco padeces una enfermedad incurable, ¿Y no quieres vivir?.
¿Hay quien entienda eso?. Nadie en realidad, por ello en mi caso procedí a aislarme quedando mal con todo el mundo que me aprecia.
Ahora mísmo que me siento mejor, si estoy mejorando, no puedo entender como "no queria vivir" pues lo pienso y no entiendo como hace nada estaba deseando morirme, es incomprensible.
Joder la vida es bella, lo mejor que se puede tener, y siempre nos proporciona momentos de sufrimiento y de mucha felicidad.
Por todo esto, si yo mísmo no me entiendo, no se como vino la depresión ni como se va, ¿como voy a pretender ser entendido?.
Hay que contar con ello, incomprensión es la norma, y que no os afecte amigos depresivos, todo irá pasando y llegará el momento en que nuevamente se abran los brazos a la vida que sigue, a salir, a ver el cielo, las nubes, charlar con un amigo o ver una buena película.
Estoy empezando a verlas tras cuatro meses de televisión apagada, igual que leer un buen libro.
Seguir luchando contra estos demonios mentales que en algún momento se irán y volveremos a disfrutar de las sencillas cosas de la vida o a sufrir por ellas, es la norma, eso es vivir y no hay nada
mas bello.
el gatufo
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