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Mi mas oculto deseo fue siempre ser escritor y aprender varios idiomas. He llegado a defenderme bien en Ingles y chapurrear algo de Frances. El cine y la fotografia me fascinan. La música, de todo tipo, ha sido siempre mi relax. La amistad la valora mas que a nada en la vida.

domingo, 31 de julio de 2016

RESIDENCIAS DE ANCIANOS (primera)









Extrañas, dificiles de entender pero lógicas, son las sensaciones  que me van inspirando las visitas que regularmente hago para ver a quien mas quiero, a quien extraño y que ya no está en nuestra casa conmigo dándome lo mejor que alguien nos puede dar, ganas de seguir viviendo.


Los lugares donde vamos a parar los ancianos cuando estamos mal, solos o no tenemos quien nos cuide, a pesar de que hoy los llaman, usando un eufemismo. Residencias por no llamarlos Asilos, no dejan de ser siniestros para todo aquel que de afuera se atreve a visitarlos. 


Por circunstacias personales me ha tocado visitar unos cuantos en los últimos veinte años de mi vida.

Mi madre estuvo en tres diferentes.
Mi suegra en dos.
Mi padre tambien estuvo en tres.
Mi hermana ha estado en dos y sigue en uno.

Y a todos acudí visitando a las personas, mi familia, que allí "residian" lo cual no deja de ser contradictorio, pues si miramos el significado de residir uno de ellos es:

Hallarse uno personalmente en determinado lugar por razón de su empleo, dignidad, u otras circunstacias.

Aquí la circunstacia es ser viejo y necesitar asistencia tenciendo claro está dinero para pagarla.

A los reclusos, o presos, ahora tambien se les llama "internos" aunque no forma parte de los sinonimos de nuestra lengua que son: Recluso, encarcelado, cautiva, prisionero, detenido, arrestado, penado y finalmente presididario.


Ahora estos sinónimos no se utilizan y volvemos al eufemismo de llamarlos "internos" con lo cual el lenguaje siguen pervirtiendo las palabras cada día un poco más.


Pues bien, cuando uno visita por primera vez una Residencia de la Tercera Edad, un Centro de Ancianos o un Asilo, la sensación que recibe es impactante y penosa.

Creo que peor incluso que un Hospital de los de antes, pues los hospitales de ahora no lo parecen menos mal, y en lugar de enfermos pareciera que hay tambien residentes en lugar de personas que sufren.

Y sigoñ.

La sensación que recibimos al entrar en una Residencia de Ancianos es fuerte, ahí tenemos la imagen nuestra, nuestro futuro, si vivimos lo suficiente para necesitar ser cuidados si es que tenemos dinero, pues si no tenemos euros estaremos solos y abandonados al devenir de la suerte en nuestras propias casas.
Según estadísticas decenas de miles de viejos, o ancianos, mueren solos en sus casas e incluso algunas de esas muertes pasan desapercibidas hasta que el hedor se hace patente para la vencidad.

La primera Residencia que visité, estaban mis padres, era como de lujo. Parecía un hotel de cinco estrellas si no te fijabas en los huespédes pues prácticamente ninguno cumplía los setenta.
Residían personas "mayores" que habían sido importantes en sus anteriores vidas, y presumian constantemente de ello.
Médicos, Abogados, Notarios, Profesores, ocupaban las habitaciones de la Residencia u Hotel para mayores, y por supuesto todos eran Válidos, lo cual no deja de ser un contrasentido pues si válidos que hacían allí.

Hay dos términos, válidos y asistidos,  para clasificar a los ancianos que a mi entender son crueles e inmisericordes a mas no poder, y estamos tan acostumbrados a escucharlos que no alcanzamos a comprender el significado real de ellos.
Está claro que se usan como metáforas, aplicaciones de un concepto o expresión de una idea u objeto al cual no se le describe de manera directa sugeriendo una comparación que facilite su comprensión. 
Válido, que ilusión soy valido no represento una carga social.
No válido, terrible significado pues ya no sirvo para nada, espero morir y punto, procurando dar poco trabajo a quien me cuida y cobra por ello.

Se admiten estas expresiones "Validos" y "Asistidos" (invalidos si no son válidos) en las Residencias de Ancianos, cuando socialmente se han erradicado esas expresiones por un hablar politica y socialmente correcto, pues se hiere a la persona que antes se le llamaba inválido, por humillante y cruel con quien ha tenido la desgracia o infortunio de llegar o nacer en esa situación.

A los ancianos asistidos, o no válidos, parece ser que ya no se les hiere y así lo comun es clasificarlos en dos o tres grupos bien diferenciados:

Válidos 
Semiválido
No Válidos o Asistidos, que suena mejor y es como se denomina a quien ya no sirve para nada.

No es así, sirven y mucho, cuando estudié la Regla de Tres en Aritmética, estaba diferenciada la Regla Directa y Regla de Tres Inversa.

Los No Validos son los más válidos para el negocio de las Residencias  pues se paga a veces el doble por tenerlos recluidos en dichos lugares.
Los no validos o asistidos son una fuente de ingresos muy válida y generan la auténtica razón de ser de este prospero negocio asistencial.

Distingamos los conceptos, socialmente son invalidos aunque crematísticamente son los más válidos para hacer dinero con ellos, y mucho dinero lo se muy bien.


continuará..................



el gatufo

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