Datos personales

Mi foto
Mi mas oculto deseo fue siempre ser escritor y aprender varios idiomas. He llegado a defenderme bien en Ingles y chapurrear algo de Frances. El cine y la fotografia me fascinan. La música, de todo tipo, ha sido siempre mi relax. La amistad la valora mas que a nada en la vida.

miércoles, 10 de febrero de 2016

VIVENCIAS (cuarta parte)




Significativo el hecho de que Emiliano padre vino al mundo cuando comenzaba la Primera Guerra Mundial y su hijo del mismo nombre que el, cuando la Segunda Guerra Mundial estaba en pleno estallido por medio mundo.
Treinta años nos separaban, pero dos guerras mundiales coincidieron con nuestro nacimiento y es algo que siempre me ha llamado mucho la atención causándome cierta zozobra.

Mi progenitor vio la luz en una pequeña aldea de Burgos, su padre, mi abuelo de nombre Esteban, era el cartero del pequeño lugar y estaba casado en segundas nupcias con la madre del niño, mi abuela Juana,  que vino a nacer justo en febrero de 1914, cuando la Primera Guerra Mundial, "La Gran Guerra"  fue llamada, estaba en ciernes. 

En julio de ese mismo año fué asesinado en Sarajevo el Archiduque Francisco Fernando y su esposa Sofía Chotek por el anarquista Gavrilo Princip. 

Muy lejos estaban de adivinar en esta aldea Española que el asesinato de una pareja real provocaria una de las peores guerras que asoló Europa desde el año 1914 a 1918.


Esteban, era pastor de ovejas ademas del cartero como ya quedó dicho. 
Se había casado con Juana, madre de Emiliano, despues de quedarse viudo con varios hijos.

Llegó a tener 11 crios, de los que solo cuatro sobrevieron, siendo Emiliano el único varón de la casa y por tanto el que llevaría el apellido.

En la aldea de Burgos, Hoyuelos de la Sierra, donde nació este chiquitín nadie era consciente de lo que sucedía en Europa.
No había ningún medio de comunicación que pudiera informarles de lo que sucedía mas alla de unos pocos kilometros del pueblo, menos lo que pudiera suceder en un mundo tan lejano como Europa del que casi nadie en la aldea hubiera escuchado algo.

Lo que si fué notorio en el pueblo y muy dañino era una pandemia que segaba la vida de infinidad de crios y muchisimos adultos en cuestión de días.

Lo empezaron a llamar "Gripe Española" sin saber el motivo y fué el colofón de decenas de calamidades que asolaban el mundo de aquella época.

Las crónicas cuentan que:

Entre las primaveras de 1918 y 1919 la Humanidad sufrió la pandemia más letal de su historia: la llamada “gripe española” que, probablemente causada por un virus gripal de origen animal, evolucionó en la mayor parte del mundo en tres brotes, siendo el segundo de ellos, en el otoño de 1918, el más mortal de todos. 


Según las estimaciones más recientes la cifra de muertos oscilaría entre 50 y 80 millones de personas, entre un 2’5 y un 5% de la población del planeta en ese momento. 
En España murió el 1’5% de la población, lo que supuso que nuestro país tuviese un crecimiento negativo en 1918. 
En EEUU (Estados Unidos) la esperanza de vida en ese año se acortó más de 10 años.  

 *******

Algunos de los hemanos mayores de Emiliano fueron víctimas de la "gripe española" y al pobre crio de cuatro años se le quedó grabado de por vida la muerte de uno de ellos que siempre le protegía. 
Siro se llamaba, y en poco más de unos días falleció uniendose a los millones de muertos en todas las partes del planeta.

Era común entonces que un porcentaje alto de pequeños no sobrepasara el año de edad, demasiada hambre, miseria y enfermedades desconocidas era la situación a la que entonces se enfrentaban las capas rurales o mas bajas de aquella sociedad.

Menos bocas para alimentar pero también menos brazos para trabajar, y afortunado aquel crio que podía ir a la escuela tres o cuatro años seguidos y aprender lo suficiente como leer, hacer cuentas y un poco de geografía.

Emiliano, listo y despabilado como pocos, tuvo el gran privilegio de acudir a la escuela hasta la edad de doce años, era el hijo del cartero y su padre había recibido alguna instrucción en su juventud. 

Esteban sabía de la importancia de dar cierta educación a sus hijos, igual que el la había recibido, por lo que permitió que los cuatro apredieran lo suficiente para no ser analfabetos, como era la mayoria de la población Española de entonces.

Los padres de Emiliano, no poseian tierras de labranza, luego con menos de catorce años el chico tuvo que salir de su pueblo y comenzar a recorrer los caminos en grandes carros tirados por mulas que se dedicaban a trasportar y comerciar con vinos, telas, y lana procedentes de otras zonas de España.


Su  hermana, Dionisia, mayor que el, muy pronto siguio sus pasos y se colocó como criada de hotel en Burgos capital, abriendo una opción a que posteriormente el chico pudiera trabajar igual que ella como mozo y pinche de cocina en uno de los mejores hoteles de la ciudad.

Para un muchacho de pueblo la oportunidad de entrar de botones en un gran hotel en la capital de la provincia era un sueño que se hizo realidad en poco tiempo.

El joven gracias a los contactos de su hermana mayor Dionisia logró que le admitieran en uno de los mejores hoteles de entonces, y feliz como puede estar un muchacho salido de su aldea disfrutó enormemente aquellos años de libertad y amor a la vida.

Eran famoso los veranos que pasaba el rey Alfonso XIII en Santander, el viaje suponía varias jornadas y frecuentemente los monarcas pernoctaban en el hotel de Burgos donde trabajaba el muchacho como botones. 
Que gran honor para el ayudar con el equipaje de los reyes, acercarse a ellos y mirar con cara de asombro al Rey y la Reina

Para el chaval la Reina Victoria Eugenia era como una diosa, admiraba profundamente se porte, sus joyas, y su belleza. El rey en cambio no le caía demasiado bien, le parecía orgulloso, altanero y bastante antipático.
Doña Victoria  por entonces era una persona infeliz, era sabido que el Rey Alfonso XIII la engañaba con unas y con otras, y eso a la esposa le entristecía profundamente.

Pasada la etapa de muchacho abandonó el puesto de botones y Emiliano fue asignado a la cocina como aprendiz o pinche para ayudar en todos los menesteres, trabajo que le hizo absolutamente feliz pues su ilusión era aprender el oficio de cocinero.

En ello estaba, aprendiendo a cocinar y tonteando con las camareras que atendían a los huéspedes del hotel cuando le surgió ir a la boda de un compañero que se casaba en una aldea del norte de Burgos.

Al asignarle como representante de los empleados del hotel el permiso estaba garantizado, iba a representar a todos los compañeros del inminente esposo.

Lejos estaba este joven de imaginar que este viaje marcaría su vida para siempre.

Casualidad o destino, nadie lo sabe, pero el hecho fue que en el baile que se celebró para festejar la boda de los novios conoció a una linda muchacha con la que tuvo ocasión de bailar y charlar en varias ocasiones. 
El flechazo fue mutuo y una vez de regreso al hotel en Burgos, el joven empezó a cartearse con la chica que había conocido en la boda de su amigo.  
Ochenta kilómetros separaban a la pareja, pero no fue obstáculo para que la relación se fuera consolidando y el joven aprovechaba cualquier permiso para tomar el autobús que unía Burgos capital con Gayangos, el pueblo donde vivía Paquita, su novia.

Cuando llegaba al lugar no era bien recibido por los mozos solteros de la localidad. Paquita estaba muy solicitada y no les hacía ninguna gracia que un mozo forastero fuera a visitar a una de las suyas. Milagro fue que alguna vez no fuera a parar al pilón del pueblo, pues ganas no les faltaban a los mozos casaderos que pretendían a la joven belleza.

Y a eso se exponía el joven, a ser manteado, molido a palos, o ser sumergido en las frías aguas del pilón del pueblo cuando se arriesgaba a visita a su novia Paquita.

Que salvó a Emiliano de ser tratado de esta manera?.

No nos sería difícil de imaginar si su supiéramos que la moza tenía un hermano Guardia de Asalto que velaba constantemente por ella y por la madre de ambos.
Sabiendo esto los muchachos del pueblo se cuidaban muy bien de agredir o gastar bromas pesadas al forastero que la visitaba con intenciones casaderas, pues con el hermano de ella pocas bromas.

El temor de todos los jóvenes de aquella época era siempre el mismo. Llegados a los veinte años les tocaba sortear, y en ese sorteo de los quintos se decidía el lugar de España donde les tocaría realizar su servicio militar obligatorio con la patria. 
El temor era África, las zonas de Marruecos y el desierto del Sahara que España poseía como colonias. Las escaramuzas en aquellas tierras costaban innumerables reclutas muertos que ya no regresarían jamás a sus lugares de origen. 
Y no había quien se librara si no era pagando grandes sumas de dinero al ministerio de la guerra, para que el servicio lo hiciera otro.

Había una gran mortandad entre los soldados destinados a la colonias Africanas, de forma que muchos jóvenes antes de ser destinados allí preferían ser prófugos de por vida y sigilosamente y sin contárselo a nadie que pudiera dar el soplo a la autoridad, marchaban hacia algún puerto del Cantábrico y emprendían la aventura de América sin esperanzas de poder retornar pues inmediatamente serian conducidos a prisión.

Padres que despedían a sus hijos, hijas, para siempre, sin ninguna esperanza de volver a verlos.

Así habían marchado algunos familiares de Emiliano y varias hermanas y un hermano de Paquita.
Paco se llamaba, prófugo e inmigrante por no ir destinado a la guerra en África, sin decir nada a nadie partió para la Argentina donde ya estaba establecida alguna de las hermanas mayores que podían recibirlo.

El joven estaba enamorado y no estaba en su voluntad la opción de abandonar su país para hacer las Americas.
Sorteo su destino como recluta y con una suerte inmensa le tocó hacer su servicio militar en Madrid.

En enero de 1935 y con casi 21 años partió de Burgos rumbo a la capital de España a cumplir su servicio de armas y sería destinado al Cuartel de la Montaña, famoso enclave que pasaría a la historia por la gran carnicería que se originó en su toma a comienzos de la Guerra Civil Española.

Emiliano esta cumpliendo su servicio militar, tiene 22 años, es  asistente de un coronel del Ejército de la República.

Pertenece al cuartel de la montaña en Madrid y está a la espera de unos días de la Permiso para el mes de agosto de 1936,  para ir a visitar a su novia Paquita en el pueblo de Gayangos en Burgos.

 
Comienza el mes de junio con el calor habitual que siempre cae como fuego en las calles de la capital de España. Nada hace presagiar para este soldado que sólo piensa en su permiso y espera ver a la novia en sus días de descanso. 

Su Coronel le dice que tome su permiso el mismo mes de junio y proceda a partir sin demora al pueblo de su novia.
"Coronel, yo preferiría ir en agosto y por lo que puede seguir sus órdenes durante el mes de julio.
Emiliano, obedece mis órdenes y ya mismo toma el permiso y sin demora saldrás mañana 30 de junio, es una orden.
Como usted pide mi Coronel, a su servicio.
El joven soldado no entendía la razón de tener que salir ahora, en julio, cuando él hubiera preferido el mes de agosto, que son las fiestas en casi todas las ciudades de Burgos.


Es una lástima piensa, con prontitud toma el tren a Burgos, y desde allí al día siguiente a la parte norte de la provincia en la que espera  Paquita, su prometida que vive con su anciana madre.



Los novios son formales, están prometidos y el espera poder dormir en casa de ella, que vive con Manuela su madre y duerme en la misma habitación que la que será su suegra, no hay posibilidad de ningún tipo de relación fuera de lo que se considera honesto en un par de novios formales en esos años.



18 de julio de 1936, pocos días después de que Emiliano este en el pueblo de su novia Paquita, ayudando en la cosecha de grano y la recogida de esta se produce el levantamiento contra el Gobierno de la Republica, revuelta capitaneada por algunos cuerpos y generales contra  el Gobierno electo, y la derecha harta ya de ciertos desmanes protagoniza un golpe de estado que pensaban sería rápido pero muy pronto comprobarán que se va a transformar en una cruenta guerra civil sin cuartel que durará tres años.

 
Podría paracer un golpe militar al igual que muchos de los anteriores, pero no será así, los gobiernos fascistas de Alemania e Italia apoyan el golpe y pronto España se dividirá en varios frentes de lucha uno contra el otro.
¿Que hago? se pregunta el soldado de permiso en casa de la novia, yo soy un soldado al mando del ejercito del gobierno republicano, está hecho un auténtico lio y no sabe que decisión tomar.

 
Es un soldado de la República de permiso y debe regresar a su cuartel central en Madrid, pero es imposible atravesar los frentes de guerra ya que es un acto suicida.


Para llegar a Madrid desde allí hay varios frentes de guerra y cruzarlos es imposible así que decide consultar con las fuerzas vitales del pueblo, el maestro, el sacerdote y el alcalde. 

Ellos le aconsejan que vaya a Burgos y se presente como voluntario para luchar en el frente.
Que frente, pregunta el joven, el del General Franco le dicen
El de los sublevados contra el Gobierno Central.

 
Con el miedo en el cuerpo  se traslada a Burgos antes de ser identificado como soldado del ejército republicano y ya se ha ofrecido para luchar contra el ejército al que pertenece y al que estaba sirviendo en Madrid.


Si le hubieran etiquetado como tal, habría recibido un disparo de inmediato y escribir esto ahora, yo su hijo Emiliano nunca hubiera podido hacerlo pues no hubiera existido.

Hazares de la vida que son imprevisibles y caprichosos o simplemente que nuestro destino ya está escrito. 
 
Vicisitudes del destino, hay que preveerlo se moviliza en un gobierno de la República en contra de las fuerzas legalmente constituidas y que prestaron sus servicios como un recluta.
¿Qué pasará ?, Es su gran temor, todos dispararle cuando esto termine y pronto pensaremos.


Como muestra la historia, la guerra civil tiene una duración de tres años, que mató a más de un millón de personas, y diezmó y separó a la Nación Española desde hace muchos años hasta el día de hoy que sigue dividiendo a la sociedad española no recuperada aun de la heridas, odios, y divergencias de semejante contienda entre vecinos, familias e incluso credos y religiones.

 
Divididos hermano contra hermano en la lucha, personas sin ideas políticas de cualquier tipo se expusieron a recibir un disparo por la sencilla razón de ser miembros de la UGT o ir a la iglesia los domingos.


Los paseos nocturnos son sin retorno, es la tónica generalizada, nadie puso fin en dicha masacre y el resentimiento de los humillados, masacrados no ha caducado y perdurará durante décadas.


En cualquier guerra civil, hay ganadores y perdedores, ganadores son consideradas los buenos, tocados por la mano divina para tomar represalias y los vencidos, por supuesto son malos y deben de ser perseguidos o aniquilados.

 
Pobres semianalfabetos que lucharon en un lado u otro dependiendo de donde tenían su pueblo, ciudad o donde el azar, como en el caso de Emiliano, les pillara él en aquel día desastroso de 18 de julio, 1936.


España era un campo de pruebas para el mayor disparate que la historia tenía ya reservada, la Segunda Guerra Mundial.
Indescriminados bombardeos de ciudades indefensas, Guernica, Madrid, Valencia, Burgos, etc .., Después de las ejecuciones sumarias, matanzas indiscriminadas en medio de la carretera, la violación, la quema de conventos, iglesias, o en cualquier lugar que estaba al otro lado que está luchando en contra.


Desafortunadamente estos hechos propagaron las semillas del odio y resintimiento que todavía perduran en la sociedad española de hoy en dia que separa izquierdas y derechas.

Incluso hoy se empiezan a borrar nombres y placas en calles y ciudades de Madrid, simplemente por el motivo de que unos nuevos dirigentes deciden suprimir todo aquello que recuerde al bando sublevado que derrocó al Gobierno Republicano.  

Para el resto de los países europeos no les sirvió de nada aprender de esta cruenta guerra pues pues acabada la contienda española comienza la Europea en Octubre de 1939.
 
Se enteraron de como eliminar de manera más eficaz al contrario y exterminar a la población civil, el bombardeo masivo de las ciudades, las pruebas y el desarrollo de nuevas armas que aniquilaran más y mejor, hasta culminar con las explosiones nucleares de Hiroshima y Nagasaki.


El hombre nunca aprende de los errores de otros, y Europa y el Fascismo en Alemania e Italia, aliados de los sublevados en España, no aprendio nada en absoluto embarcándose en la mayor contienda que hasta el momento ha sucedido.











el gatufo

No hay comentarios:

Publicar un comentario